El dispositivo policial puesto en marcha a finales del año pasado culmina con la detención de una mujer y un hombre que se encontraba a la espera de juicio por su implicación en otro delito de tráfico de drogas.

Agentes de la Policía Nacional de la Comisaría Local de Ponferrada dieron por finalizado el operativo policial que habían puesto en marcha a finales del año 2019 con la detención el 27 de octubre de un hombre y su pareja sentimental, una mujer, españoles y de 43 años de edad, ambos encartados en un delito contra la salud pública- tráfico de estupefacientes.

La investigación comenzó al percatarse de que el hombre tras salir de prisión y pendiente la celebración del juicio por los hechos que motivaron su ingreso, continuaba con su tren de vida sin que al mismo se le conociese ninguna actividad laboral que motivara sus continuos desplazamientos en fines de semana y festivos a Galicia, concretamente a el Ferrol. En sus viajes utilizaba hasta tres vehículos diferentes y adoptaba medidas de seguridad propias de quien intenta evitar que se rastree su destino.

Realizadas las comprobaciones pertinentes se pudo determinar que el investigado acudía a un asentamiento en el Polígono Industrial de Catabois, principal foco de suministro de droga de la localidad.

A raíz de las investigaciones se puede determinar que tiene una amplísima “cartera de clientes” la mayor parte de ellos conocidos consumidores de sustancias estupefacientes.

Dicha distribución y venta la realiza desde distintos lugares, los cuales va alternando, seguramente y al igual que hacía con los viajes, con la intención de dificultar la acción policial.

Como colaboradores de su actividad ilegal operaba su pareja, en cuyo domicilio, alquilado por un hermano del detenido, realizaban la venta de sustancias estupefacientes, también en un bar de la zona de Compostilla, así como en una finca rustica en el paraje conocido como las Chanas. Este último enclave es una finca vallada perimetralmente, con una caseta de obra utilizada como punto de venta de droga, a la que acuden «cundas» (taxis de la droga).

En colaboración con la Policía Nacional del Ferrol se intercepta al investigado con claros indicios de que el mismo junto con su pareja en ocasiones hacen de “mula“ en sus desplazamientos para transportar la mercancía hasta su localidad de residencia. Posteriores vigilancias permiten conocer que la mujer además de los viajes al Ferrol, desde mediados de octubre también se desplazaba a León.

Con toda la información y pruebas recabadas de la participación de ambos en un presunto delito de tráfico de estupefacientes, el día 27 de octubre se procedió a su detención interviniéndoles in situ la droga que portaban así como dos mil euros en efectivo.

Ese mismo día, con la colaboración del grupo de guías caninos de la Jefatura Superior de Policía de Castilla y León, se procedió al registro de los cuatro puntos de distribución de droga donde también se incautaron 160 gramos de heroína, 100 gramos de cocaína, 6 gramos de marihuana, balanzas de precisión, otros efectos relacionados con la actividad delictiva, así como 4.900 euros, seis teléfonos y un vehículo.

Ambos detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Ponferrada quien decretó su ingreso en prisión.