Cultura

Avanza el proceso para declarar BIC la antigua central de la MSP

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Los representantes de la Comisión de Monumentos y Patrimonio Histórico de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando han visitado la instalación estos días

Pedro Navascués y Mª del Carmen Utande en el Museo de la Energía

La antigua central de la Minero Siderúrgica de Ponferrada (MSP) da un paso más en el proceso que busca su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC). A tal efecto, Pedro Navascués y Mª del Carmen Utande, presidente y secretaria de la Comisión de Monumentos y Patrimonio Histórico de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, han visitado la instalación hoy conocida como La Fábrica de Luz. Museo de la Energía.

Aunque por el momento no se puede desvelar parte de ese informe, durante el proceso han coincidido en destacar la conservación del edificio y su gran singularidad, así como su excelente musealización.

A continuación se realizará el informe técnico para continuar con el proceso. Desde el museo, su directora, Yasodhara López considera que “siendo reconocida la antigua central uno de como uno de los enclaves emblemáticos del patrimonio industrial español, la solicitud como BIC es un paso natural y supone un punto más que garantiza la preservación y el cuidado del patrimonio de nuestro territorio”.

Qué es y qué supone ser un Bien de Interés Cultural

La Ley de Patrimonio Histórico Español de 1985 recoge la protección del patrimonio histórico y de relevancia en la sociedad y, por ello, aquellos bienes que por su relevancia social, histórica o su singularidad se consideren de protección, reciben esta declaración de Bien de Interés Cultural (BIC). Además, el BIC es la máxima distinción que se otorga a un bien a nivel nacional.

En el caso de que se trate de un bien inmueble, como La Fábrica de Luz. Museo de la Energía, la administración difundirá a la sociedad su condición de BIC de manera pública para darlo a conocer. Pueden ser BIC de carácter inmueble los monumentos históricos, los conjuntos históricos, los jardines históricos, los sitios históricos o las zonas arqueológicas. Tras la declaración BIC, el bien pasa a tener medidas especiales en materia de protección para su conservación, entre otras. De esta manera, un BIC pasa a ser formalmente patrimonio de la sociedad y de la riqueza cultural del Estado.

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