Cultura
El Campus de Ponferrada acoge la exposición ‘Catastros y catastrones: la huella de la propiedad en Castilla y León’
A través de 14 paneles explica la historia de la cartografía catastral en nuestro país, y es de especial interés para los estudiantes y egresados en Geomática.
El vestíbulo de la biblioteca del Campus de Ponferrada de la Universidad de León (ULE), acoge desde el pasado 15 de febrero una exposición titulada: ‘Catastros y catastrones: la huella de la propiedad en Castilla y León’, que a través de catorce paneles explicativos muestra la historia de la cartografía catastral en nuestro país, que podrá ser visitada libremente hasta el jueves 9 de marzo.
Aunque está abierta a cualquier persona interesada en conocer este tema a través de fotografías, planos y documentación diversa, reviste especial interés para los estudiantes que cursan el grado de Geomática que se imparte en el campus del Bierzo, ya que precisamente la labor de cartografía catastral es una de las funciones profesionales que desarrollan los egresados en dicha titulación.
La exposición forma parte del programa itinerante Exposiciones Alacarta que promueve la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León, en colaboración con diferentes instituciones de la región, para recuperar y difundir el patrimonio fotográfico castellano y leonés, promocionar el arte visual, apoyar a los centros expositivos e incentivar el desarrollo de las zonas rurales.
Reparto de la tierra y derecho de la propiedad
La tierra siempre ha sido objeto de reparto. Ya las primeras civilizaciones de la historia crearon catastros que identificaban el derecho de la propiedad y favorecían el reparto de los recursos con los que satisfacer las necesidades generales. La primera página del Catastro español se escribe en la España romana al instaurarse el ‘capitastrum’ o registro de unidades per cápita, que tenía una finalidad fiscal y de reconocimiento público de la propiedad.
Tras la sequía de proyectos catastrales en la época medieval y algunas experiencias aisladas durante el reinado de Felipe II, la dinastía borbónica promovió la elaboración de los primeros catastros en nuestro país o inventarios generales de la propiedad inmueble en los que se describían las características físicas, jurídicas y económicas de todos los predios. Entre ellos destacó el conocido como ‘Catastro del Marqués de la Ensenada’.
La aspiración por implantar un proyecto de corte ensenadista será nexo común de todas las iniciativas catastrales desarrolladas en España en el siglo XIX. Los Archivos Históricos Provinciales de Castilla y León documentan más de doscientos cincuenta años de Catastro en nuestra Comunidad, siendo los depositarios de las transformaciones experimentadas por éste hasta la actual y completa descripción de la propiedad inmobiliaria.
A la importancia que se le debe otorgar para el estudio de la evolución de la propiedad hay que unir el valor legal y probatorio que estos documentos confieren sobre el derecho de la propiedad de la tierra en Castilla y León.