El Ayuntamiento de Ponferrada informa que desde el primero de junio, inicio de la campaña de verano, que comenzó con restricciones en los aforos, el BIC Castillo de los Templarios y los tres museos, han registrado 45.000 visitas hasta mediados de agosto. Aparte, se han completado los aforos máximos en las más de cincuenta actividades culturales realizadas durante este período (conciertos, visitas teatralizadas, exposiciones) y que continuarán esta semana con los tres conciertos de cámara del ciclo Corteza de Encina y con el Festival de Jazz en el Castillo Viejo durante la última semana del mes.

Actividades que se prolongarán hasta septiembre para conectar con un otoño cultural en el que se realizarán más eventos culturales vinculados al patrimonio cultural y museístico de Ponferrada. Los martes el Museo del Bierzo acoge los talleres infantiles vinculados a piezas de la colección (Fabularia Teatro) y el Castillo acoge las visitas teatralizadas para público familiar por Dinamia Teatro. Los días 3 y 4 comenzarán las representaciones teatrales de Teatro del Canal en el Museo del Ferrocarril.

La afluencia de público, mayoritariamente familias pertenecientes a un turismo nacional en alza, que selecciona destinos de interior con recursos relevantes del patrimonio cultural y natural, se ha incrementado con el inicio de las vacaciones familiares a finales de julio, en una cadencia que, durante la primera mitad de agosto, supera el millar de visitantes diarios al Castillo, con fechas y picos de afluencia masiva (4 de agosto: 2.667 visitantes; 11 de agosto: 2.900 visitantes).

Sólo durante esta última semana, y coincidiendo con el fin de semana largo del 15 de agosto, se han registrado cerca de 10.000 visitas (los museos más de 2.000 visitantes a los que se suman las 7.500 del Castillo).

Con el aforo al 75%, durante algunas jornadas las colas han sido continuas a pesar de las altas temperaturas de los últimos días. Desde la dirección del Servicio de Patrimonio y Museos del Ayuntamiento se destaca la ausencia de incidencias, a pesar de la afluencia masiva, el buen hacer del personal municipal para atender al público y el ejemplar comportamiento de los visitantes, que han disfrutado del Castillo, los museos y la ciudad con el máximo respeto hacia las normas sanitarias y de higiene y hacia los valores patrimoniales y medioambientales del principal monumento de la ciudad.