Cultura
El CSIC revela nuevos datos sobre la red de canales romanos y la ruina montium en Las Médulas
Los resultados del proyecto ZAMEdH confirman la existencia en Las Médulas de una red canales de más de 800 kilómetros en una superficie de 49.000 hectáreas. Además, aportan una nueva hipótesis sobre el sistema de ruina montium
El paraje de Las Médulas situado al noroeste de los Montes Aquilianos es uno de los más bellos que ofrece el Bierzo al visitante con un conjunto montículos formados por sedimentos rojos miocenos asociados al oro, el mineral que los romanos explotaron creando una impresionante red de canales y galerías.
«Es sin duda ninguna la red hidráulica minera más importante conocida en el mundo antigua«, afirma el arqueólogo del CSIC, Javier Sánzhez-Palencia, quien en el año 2021 junto con Almudena Orejas coordinaron el proyecto ZAMRedH sobre la zona arqueológica y la red hidráulica, que finalizó en el 2023 y cuyos resultados se presentaron en la Casa del Parque de Carucedo.
Uno de los objetivos de esta iniciativa era aportar argumentos científicos para justificar la ampliación de las declaraciones BIC y Patrimonio de la Humanidad incluyendo la red de canales. «Desde nuestro punto de vista, científico, se deberían ampliar las declaraciones. Ahora, nosotros no somos los responsables políticos, administrativos que pueden tomar esa decisión», añadió Sánchez-Palencia.
En el proyecto participaron más de 20 investigadores del CSIC, de las universidades de Vigo, Cantabria, Tarragona, Valencia, Cartagena y Jaén para analizar la red de 29 depósitos de agua y 32 canales con una extensión que ahora se estima, con las últimas investigaciones, en más 800 kilómetros, «De forma que pasarían de ser y ocupar 3.000 hectáreas a 49.000€ hectáreas, lo cual es un paso muy grande», señaló el arqueólogo.
La investigación se centró en 6 depósitos y 10 canales con la colaboración también de la empresa de arqueología Terra-Arqueos S.L, que ejecutó los sondeos y BETA Analytic Ltd. que realizó dataciones radiocarbónicas de los elementos, con resultados muy interesantes, «Nos permiten conocer la evolución diacrónica, desde su formación a la actualidad dándonos un motón de datos de información paleoambiental, sobre cómo ha evolucionado el medioambiente del entorno», describió Palencia.
Datos que, además, no solo sirven para justificar la ampliación de las declaraciones del paraje sino que permiten confirmar la datación de las estructuras de los canales y las galerías que, a mayores, se escanearon utilizando la tecnología del láser Lidar. Ahora, se puede decir que datan de los siglos I y II d.C.
Pero, probablemente una de las conclusiones más interesantes del estudio es una nueva hipótesis, desarrollada por la Universidad de Vigo a partir de modelos generados por ordenador, sobre cómo utilizaban los romanos el sistema de Ruina montium para extraer el oro de la zona. Según los mismos, ahora lo esencial son las galerías, «antes acudíamos a un modelo con una intervención bastante importante del agua, sigue interviniendo para lavar los restos de material una vez producido el derrumbe pero no interviene de forma tan sustancial en el proceso en si mismo, donde si son fundamentales las galería que se hacen y el socavamiento de los frentes de explotación», explicó Sánchez-Palencia en su intervención.
Con el proyecto, en el que la Junta de Castilla y León invirtió 110.000 euros, se ha obtenido una valiosa información que se podría completar con más estudios sobre el resto de canales, galerías y depósitos, según afirma el propio Sánchez-Palencia, para mejorar aún más el conocimiento que se tiene de este espacio y ampliar su protección.