El Pleno de Vilalfranca del Bierzo homenajea al alcalde republicano fusilado en 1936, Antonio Gabelas Álvarez

El pleno que se celebra hoy en el Ayuntamiento de Villafranca del Bierzo rendirá homenaje al alcalde republicano fusilado en 1936, Antonio Gabelas Álvarez.

Antonio Gabelas Álvarez fue fusilado en Ponferrada junto a otros 8 hombres que formaban parte de la corporación municipal de la localidad, salida de los comicios celebrados en febrero de 1936. Los nueve hombres fueron sentenciados a muerte en la causa militar 2/36, depositado en el Archivo Militar de Ferrol y de la cual la ARMH ha hecho llegar una copia a los familiares. Como se puede comprobar en los documentos aportados a las familias, el cumplimiento de la sentencia a muerte se produce el 21 de septiembre de 1936 en el Cementerio de Ponferrada.

Durante el año 2014, la familia de Antonio Gabelas solicitó la reparación moral que concede el Mº de Justicia, así como la anulación del procedimiento militar llevado a cabo contra su abuelo y todos sus compañeros.

El día 23 de octubre de 2014, el actual Ministro de Justicia Rafael Catala firmo:

«Ha quedado acreditado, que Don Antonio Gabelas Álvarez, alcalde de Villafranca del Bierzo, sufrió las consecuencias de la Guerra Civil, siendo condenado por sentencia en Consejo de Guerra el 12 de septiembre de 1936 en Ponferrada (León) por un delito de rebelión militar a pena de muerte y fusilado el 21 de septiembre de 1936 en Ponferrada. Y visto que Don Antonio Gabelas Álvarez tiene derecho a obtener la reparación moral que contempla la ley 7/2007, de 26 de diciembre, mediante la cual la democracia española honra a quienes injustamente padecieron represión o violencia durante la Guerra Civil y la dictadura, expide a su favor la presente declaración de reparación moral y reconocimiento personal.”

Según el trabajo realizado por la ARMH en los registros Civiles de todo el Bierzo, en el municipio de Villafranca existen registradas 61 personas cuya muerte tiene relación con la violencia implementada por los militares sublevados, desde el 8 de agosto de 1936 hasta finales de los 40. En León, por lo menos fueron fusilados otros 5 vecinos, aunque se conocen más casos de víctimas del franquismo que no han sido registrados y cuyo paradero se desconoce.

El historiador berciano Alejandro Rodríguez, miembro de la ARMH, cifra en más de un centenar a los villafranquinos encartados en procedimientos militares y con diferentes tipos de penas. No podemos olvidarnos tampoco de los vecinos del municipio, que desaparecieron en los campos de concentración nazis de  Mauthausen y Gusen, Antonio Abella y José Mestre. O de todas aquellas personas que sufrieron cárcel, destierros o torturas por su relación con la Resistencia a la dictadura durante más de tres lustros.