Arte
“Inditas” cuadro de la semana en el Marca de Cacabelos comentado por Silvia Blanco
Silvia Blanco sobre «Las inditas»:
La exposición de Pepe Carralero sorprende en cada sala, en cada lienzo,… es un lujo contar con su pintura en el Museo M.AR.CA de Cacabelos hasta el 15 de Septiembre. A través de esta gran Retrospectiva recorremos toda una vida ligada al mundo del arte a través de sus vivencias, aprendizajes,…
Esta gran exposición con un exhaustivo recorrido cronológico muestra la conexión pictórica con la realidad de Cacabelos, con los hechos cotidianos, con su aprendizaje en la Universidad, con sus vivencias en el Salvador y finalmente una explosión de madurez a través de los retratos y del paisaje.
Sin embargo, hay una obra de Carralero que me impresiona mucho, me inquieta, me produce desazón: INDITAS. Se trata de una obra realizada en 1971, en su etapa de residencia en Centroamérica y concretamente en el Salvador.
Con esta pieza “Inditas “explora en una realidad social de crisis política, vive el conflicto pre-bélico interno como fue la guerra civil de El Salvador. Retrata una personalidad melancólica, las relaciones humanas y la ansiedad que envolvieron la carrera del pintor en ese momento concreto.
Todas las pinturas de la etapa americana de Carralero nos transmiten un cambio de rumbo, a través de su forma de representar el paisaje, los rostros, los colores, los sentimientos,… Se aprecia un cambio en la utilización del color, de la mancha, de los gestos,… Me recuerda a obras del expresionismo alemán, en esta obra titulada Inditas aparecen dos personas ausentes, una madre y una hija. Permanecen con la mirada perdida. La madre confiere una cierta protección a la niña llevándola en brazos. El fondo: no importa. Aparece desdibujado, pero sin embargo se acierta una miseria infinita. Una sensación de abismo y sin embargo, parece, se ha parado el tiempo.
En esta obra recurre a la acentuación o deformación de la realidad como mecanismo para expresarse con una clara influencia del expresionismo pictórico, literario y teatral, constituye un modelo de cine como medio artístico y de vanguardia.
Apreciamos una estilización de los decorados, en los gestos y la iluminación, fruto, sobre todo, de la influencia de la figuración en esta época. Si el expresionismo buscaba expresar sentimientos y emociones por encima de la realidad objetiva, nada mejor que crear unos decorados que imposibiliten cualquier referencia a la realidad.
Trata de reflejar los estados de ánimo recurriendo a la simbología de las formas, deliberadamente distorsionadas. Deforma la realidad para mostrar lo que hay más allá de esa falsa realidad, el lado más oscuro y angustioso de la humanidad. Los personajes están marcados por el mal y por un sentimiento de angustia, al igual que la atmósfera social. La temática gira en torno al mundo interior de los personajes, sus fobias, sus temores, la fuerza del inconsciente…
Me gustaría destacar esta fuerza creadora que observamos en todos sus lienzos, tanto en su color como en su forma así como su pincelada zigzagueante y envolvente. Esas urbes siempre rurales, llenas de personajes inquietantes, ojos penetrantes, observándonos, que nos provoca ternura, estos escenarios de la pobreza que parece ahogar a los personajes en una absoluta soledad.
Lo que más me fascina de este artista es esta osadía que no permite en ningún momento la duda, ese pensamiento racional que en su caso rehúye casi de forma absoluta en beneficio de la expresividad de la obra. El trazo seguro, contundente, muchas veces agresivo en los fondos que rompe la perspectiva de las líneas, pero que consigue gracias a ello un movimiento constante de sus personajes y sobre todo nos sobrecoge con su increíble magia pictórica.
Pepe, gracias por enseñarlos una lección con cada pincelada, con cada apunte, con la insinuación de un mundo detrás de cada pintura.