La DGT pone 188 controles, 24 cámaras y 1 dron para vigilar las carreteras de Castilla y león durante el verano

El delegado del Gobierno, Javier Izquierdo, ha presentado este jueves la nueva campaña de concienciación y el dispositivo de vigilancia y regulación que la Dirección General de Tráfico ha preparado para los meses de verano y arranca mañana viernes día 3 de julio, con el lema «Este país no puede soportar más muertes. Al conducir, extrema las precauciones»

El delegado se refirió «al año excepcional que estamos viviendo debido al coronavirus, una pandemia que hace de este un verano diferente, así como de esta operación especial de tráfico una ocasión para retomar la nueva normalidad con prudencia, responsabilidad y sin imprudencias, independientemente de las ganas que tenemos de viajar y buscar lugares para el descanso».

Dispositivo verano

Por lo que respecta a la gestión del tráfico y para facilitar la movilidad en carretera, se establecerán las siguientes medidas: instalación de carriles reversibles, señalización dinámica en 288 paneles de mensajes, paralización de obras, restricción de la circulación de camiones con mercancías peligrosas, 188 puntos de control de velocidad, 95 radares móviles, 1 helicóptero, 24 cámaras de control de cinturón y móvil, 1 dron para actividades de regulación y 1 camioneta camuflada.

Siniestralidad

Durante el 2019 fallecieron 28 personas en accidentes de tráfico (18 fallecidos en julio y 10 en agosto) y 6 resultaron heridos graves. El objetivo es y rebajar esas cifras. Ocho de cada diez fallecidos se produjeron en accidentes mortales que tuvieron lugar en carreteras convencionales, es decir, aquellas vías que no tienen separación de sentidos de circulación. Por tanto, atención a los viajes cortos por estas carreteras que es donde los conductores tienen que extremar la prudencia y la DGT reforzará la vigilancia.

El 62% de los accidentes mortales se debieron a salida de la vía. Detrás de este tipo de accidentes suele estar una velocidad excesiva y/o alguna distracción. El 39% de los fallecidos durante el verano fueron vulnerables. La franja horaria con mayor concentración de accidentes es después de comer.