Infraestructuras
La Junta Vecinal de Villavieja critica la obra realizada en la carretera de acceso al pueblo
La Junta Vecinal de Villavieja quiere denunciar la actuación realizada por la Diputación Provincial en las obras de la carretera LE-6205 que enlaza la N-531 con Villavieja, que califica de lamentable porque se ha convertido en un lodazal de agua, barro y piedras tras las últimas lluvias.
En el tramo que va desde el cruce de Paradela de Muces hasta el Castillo de Cornatel, la canaleta de desagüe está más lata que la calzada y sin apenas inclinación con lo cual el agua en vez de dirigirse al desagüe inunda la carretera convirtiéndola en un arroyo. Antes de las obras había una cuneta que recogía el agua procedente del monte situado enfrente del Castillo, ahora eso se ha suprimido y sustituido por una rigola de hormigón sin apenas pendiente, con lo cual el agua sobrepasa la calzada arrastrando consigo barro y piedras que los propios miembros de la Junta Vecinal y los vecinos han retirado en varias ocasiones.
En el tramo de Cornatel a Villavieja también se ha suprimido la mayor parte de la cuneta quedando el talud a la altura de la carretera, cayendo piedras y vegetación dentro de la calzada. En el tramo que discurre desde el entronque con la carretera N-531 hasta el cruce de Paradela de Muces, el desagüe se ha dirigido hacia la escombrera de pizarra existente en la zona provocando la queja del dueño debido al peligro que ello supone y cerca de la cual han dejado los restos del cartel anunciador.
El 23 de enero La Junta Vecinal le hizo llegar al Alcalde de Priaranza un video de lo que estaba ocurriendo a fin de que tomase cartas en el asunto para ponerle remedio antes de la recepción de las obras por parte de Diputación. «Al no recibir contestación y ante la pasividad del alcalde, después de enterarnos por la prensa de que la recepción de la obra se había llevado a cabo, no ya quedado más remedio a esta Junta Vecinal de poner el asunto en conocimiento de la Diputación», afirman desde la Junta Vecinal.