Las jornadas “Otra economía es posible” reivindican una política energética limpia y seria que fomente el empleo

La creación de una red energética baja en emisiones de gases de efecto invernadero es posible. Hay una alternativa al sector actual, responsable del 70% de los gases contaminantes y que se consideran responsables del aumento de temperatura en el planeta. Pero para ello, hace falta una política energética diferente, abierta a nuevos proyectos y alternativas que permitan generar empleo.

IV Jornadas «Otra economía es posible». Foto: Raúl C.

Éste es el tema central de las IV Jornadas “Otra economía es posible, transición hacia una economía baja en carbono” que se celebran en la UNED de Ponferrada y que están organizadas por Comisiones Obreras con la colaboración de la UNED.

Mariano Sanz Lubeiro, secretario de salud laboral y medio ambiente de CC.OO, plantea alternativas que ya están funcionando con buenos resultados y que están relacionadas principalmente con la generación de electricidad a partir de biomasa, palas eólicas y placas fotovoltaicas, de uso industrial y comunitario. Pone como ejemplo la planta de biomasa instalada en el polígono de Villadangos.

La gestión de los residuos es otra de las alternativas que no se está aprovechando, no sólo para ser menos contaminantes sino también para la generación de electricidad. “Necesitamos cambiar el modelo energético y económico, buscar energías más baratas”, mantiene Sanz.

Gonzalo Díez, secretario general de CC.OO de Industria de Castilla y León, defiende la creación de una política energética que sea seria nivel estatal con una dirección estudiada y debatida que permita no sólo una proyección de futuro al sector sino que fomente también la creación de empleo. Denuncia que durante este gobierno se ha paralizado prácticamente al sector incumpliendo el Plan del Carbón firmado y sin la búsqueda de alternativas y alianzas con otros países europeos productores de carbón.

Para Ursicinio Sánchez, secretario de la unión comarcal de CC.OO, la alternativa económica en el Bierzo a la debacle del carbón puede estar en la creación de una red industrial transformadora de los productos agroalimentarios que se producen en esta tierra. Lamenta que la industria de Castilla y León se haya centralizado únicamente en Burgos y Valladolid.

Finalmente Alberto González, responsable de comunicación de CC.OO de Industria Castilla y León, denuncia que se esté abandonando el proyecto de investigación desarrollado por CIUDEN para la captura, transporte y almacenamiento de CO2, por ser una alternativa que se puede poner en práctica y que convertiría a la generación de electricidad a partir de carbón como una energía más limpia y respetuosa con el medio ambiente.