Cultura
Miguel José García y Rafael Goyanes, a la luz de otros documentos, revelan aspectos desconocidos de la vida de Enrique Gil y Carrasco
La revista Bierzo de 2016 que edita el Archivo Histórico Parroquial de la Basílica de Nuestra Señora de la Encina presenta un artículo que firman Miguel José García y Rafael Goyanes que, a la luz de los documentos consultados, cambia y actualiza muchos aspectos de la vida de Enrique Gil y Carrasco, algunos de ellos desconocidos hasta ahora.
Las nuevas investigaciones revelan que las idas y venidas de Gil y Carrasco a Ponferrada no se debieron por causas desconocidas o capricho sino porque padecía de una salud débil y de tisis (tuberculosis), enfermedad que sólo se le detectó cuando se trasladó a Alemania. Tras consultar las hojas de servicio de Gil y Carrasco, era funcionario, Miguel José García afirma que encontraron numerosos permisos que el autor solicitó para descansar.
Entre los documentos encontrados están también su expediente de bachiller en Leyes, la solicitud de fecha de Enrique gil y Carrasco al decano para la realización del examen de grado de Bachiller de Leyes o el acta de juicio de exención para no ir al ejército o a la milicia nacional, tras la presentación de su padre, Juan Gil, del justificante de pago de 4.000 reales.
Los autores del artículo afirman que es necesario investigar con más profundidad la vida de Gil y Carrasco durante su estancia en Alemania, porque además de su labor diplomática o relaciones sociales con Humbolt y la nobleza prusiana, se puso en contacto, a través de Hartzenbusch, con el hispanófilo germano Víctor A. Huber, que en ese momento estaba escribiendo un libro sobre el Cid y un diccionario español-alemán.
Éste contacto es de gran importancia, apunta García, ya que Huber le hizo ver a Gil y Carrasco el desfase que había entre la literatura española y la alemana que, en aquellos años, ya había superado el romanticismo
En la presentación de la revista, Miguel José García, ha manifestado que echó en falta del Congreso Internacional de Enrique Gil y Carrasco de 2015, unas ponencias que aportaran nuevos datos o conclusiones que no fueran las que se podían extraer de la tesis doctoral que realizó en su día Jean Louis Picoche. Por ello, se propuso indagar más en la vida del autor berciano consultando otros documentos de la Milicia Nacional, el Archivo Municipal de Ponferrada, el Archivo Universitario de la Universidad de Valladolid, el documental de la familia Soto Vega.Condes de Encina, o la Biblioteca Nacional, entre otros.
La revista Bierzo presenta otros 17 artículos, entre ellos está uno sobre el Castillo de Villafranca y su transformación como palacio de Don Pedro de Toledo y Colonna, firmado por Vicente Fernández y que permite reconstruir la forma de vida que tenía la nobleza en el siglo XVI. La familia Toledo fue una de las destacadas que lideraron el mecenazgo en Italia.
Fue el V marqués de Villafranca, don Pedro de Toledo y Colonna, el que intentó convertir el castillo no sólo en un palacio en el que poder descansar con comodidad de su trabajo en los diversos cargos que ocupó por mandato de la corona, sino también en una residencia habitual y una verdadera corte al uso de la nobleza titulada.
Los otros artículos tratan temas como el yacimiento arqueológico de “Fuente de San Esteban”, de Inés Díaz, la “Rebelión de las Comunidades de Castilla y León en opinión de Gil y Carrasco”, de Diego Castro Franco, “Escritores bercianos y Maragatería y arrieros maragatos en el Bierzo en el siglo XVII”, de Miguel Ángel González, o las “Musas de las artes escénicas. Historia del Teatro de Bembibre”, de Manuel Olano, entre otros.
El rector de la Basílica de la Encina, Antolín de Cela, ha manifestado su satisfacción por la publicación de un numero más de la revista Bierzo porque supone “Aportar un granito de arena al conocimiento de la Comarca y amor por lo nuestro, lo que nos han dejado nuestros mayores”.