Se presenta un informe sobre la conveniencia de la creación de la comunidad autónoma leonesa

Julio Lago, Santiago Asenjo, Javier Callado y José Luis prieto han presentado hoy en Ponferrada un informe técnico sobre la creación de la comunidad autónoma de la región leonesa. En el mismo se argumentan una serie de conclusiones y propuestas que buscan dar fundamento y consistencia a la reivindicación de la separación de León de la actual comunidad castellanoleonesa.

Como han manifestado los autores del trabajo, con ello se pretende corregir el error cometido en 1983 cuando se diseñó el actual mapa de comunidades en España y se vincularon Castilla y León. Un error que se ha arrastrado durante 37 años y que ha demostrado tener repercusiones negativas para León, porque además no se ha conseguido generar un sentimiento de pertenencia a la misma.

En el informe se manifiesta que aunque la intención es lograr una autonomía de la antigua región leonesa, que incluye además de León a Zamora y Salamanca, los datos que se presentan corresponden a la creación de dos distritos en la provincia, en León y Ponferrada. En este último caso, la ciudadanía tendría que decidir si se conserva el actual Consejo Comarca del Bierzo.

Se pone de relieve que, contrariamente a lo que se puede pensar, la autonomía no supondría más coste en representación política ya que originaría un ahorro por desaparecer un nivel administrativo. De 38 representantes políticos (25 diputados provinciales y 13 procuradores en las Cortes) se pasaría a un número comprendido entre 30 y 34 diputados regionales. Tampoco sería un mayor coste para el Estado porque se autofinanciaría con los fondos asignados a la Junta de Castilla y León, que corresponden a la provincia leonesa más el presupuesto de la Diputación Provincial.

El Consejo de Gobierno referido a la provincia de León tendría un representante autonómico, un vicepresidente-consejero autonómico (Ponferrada ) y nueve consejerías, de las cuales, seis se situarían en León y tres en Ponferrada.

Según el informe, para el distrito de Ponferrada supondría territorializar en torno a 500 millones de euros anuales, proporcionalmente a su población.

Se critica que la Junta de Castilla y León provincializa en León en torno a 1.100 millones de euros, cantidad alejada de los casi 2.100 millones que la provincia de León debería recibir en función de su población. A esto se añade que la Junta deja sin provincializar al año más del 40% de sus fondos, más de 4.000 millones. Dinero que se reparte sin criterio de proporcionalidad y a conveniencia del propio gobierno autonómico. Por ello, el informe estima que León deja de recibir alrededor de 500 millones de euros menos de lo que debería. Un desajuste que se pone como una de las causas del declive de la provincia.

Por último, en el informe se destaca que hay soporte jurídico en la Constitución de 1978 para la creación de la nueva autonomía leonesa, así como en el vigente Estatuto de Autonomía de Castilla y León.