Tres generaciones de vecinos de Riego de Ambrós se reencuentran en las fiestas patronales

La localidad perteneciente al municipio de Molinaseca, Riego de Ambrós, celebró el sábado sus fiestas patronales con un pueblo lleno de vecinos y visitantes que se reunieron para compartir vivencias y estrechar lazos de amistad y disfrutar de las actividades programadas

Sonaron las campanas del siglo XVI en la iglesia parroquial de Santa María Magdalena de Riego de Ambrós para anunciar que, como todos los años, en julio se celebran las fiestas en honor a su patrona y a la Virgen del Rosario. El repicar de las campanas se entremezcló con la música de la agrupación Alegría Berciana que, con un pasacalles, atravesó este pueblo que luce con orgullo sus magníficas casas de arquitectura rural, que se llenan con visitantes y antiguos vecinos que no dejan pasar estas fechas para volver a sus orígenes.

Muchos son familiares de segunda y tercera generación que vuelven a las casas de sus antepasados siempre que pueden para disfrutar de unos días de descanso, del agua fresca de sus fuentes, de las magníficas vistas de los Montes Aquilianos, o de sus numerosas rutas de senderismo.

Las fiestas fueron también para el reencuentro de vecinos, amigos que recordaron con felicidad aquellas historias, aventuras y experiencias que les marcaron en su infancia.

A casi mil metros de altitud, Riego de Ambrós es parada obligatoria del Camino de Santiago. Recibe y acoge a los peregrinos en un albergue que está junto a la ermita de San Sebastián y San Fabián, de donde sale la Calle Real que vertebra al pueblo y llega hasta a la Plaza de la Paz, donde se disfrutó de la paellada y de otras actividades programadas para las Fiestas.

La procesión en honor a Santa María Magdalena recorrió todos estos espacios y terminó en la iglesia, junto al arroyo que cruza esta localidad que es una de las ocho que forman el municipio de Molinaseca.